Elon Musk está empecinado a convertirse en el amo del futuro y maestro de todo tipo de transporte imaginado por la humanidad que vaya por cielo, mar y tierra. Del cielo y la tierra (incluso bajo ella) ya conocemos bien sus proyectos, pero del mar no habíamos escuchado mucho hasta ahora.
Durante la reunión de accionistas de Tesla que se realizó el martes, un asistente le preguntó a Elon Musk sobre la posibilidad de desarrollar un automóvil acuático, el empresario se rió y dijo: “Es curioso que mencione, tenemos un diseño para un automóvil submarino como el de The Spy Who Loved Me”.
El auto en cuestión era un Lotus Esprit de 1976, que casualmente le pertenece a elon Musk desde hace más de 5 años. Lo compró en una subasta de Londres por 997 mil dólares.
“Cuando era pequeño en Sudáfrica, era increíble ver a James Bond en The Spy Who Loved Me, que sacaba su Lotus Esprit de un muelle, presionaba un botón y lo transformaba en un submarino bajo el agua. Me decepcionó saber que realmente no se puede transformar. Lo que voy a hacer es actualizarlo con un tren de potencia eléctrico Tesla e intentar transformarlo de verdad”, dijo Musk cuando compró el automóvil de James Bond en 2013.
Musk explicó que sería posible crear una versión funcional del vehículo, pero que definitivamente no sería fácil lograrlo. “Creo que el mercado para esto sería pequeño, pequeño, pero entusiasta”, agregó.
