Científicos de la NASA y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) alertaron por la tormenta solar que impactará contra la Tierra esta misma semana el 20 de agosto de 2020, por lo que se esperan algunas consecuencias contra las que tenemos que estar prevenidos.
(NASA/SDO)
Los expertos en clima espacial de la NASA y la NOAA informaron claramente que este fenómeno solar afectará, primordialmente, las redes eléctricas y las radiofrecuencias al interior de nuestro planeta, pero también tendrá otros efectos dentro de la Tierra.
Tamitha Skov, especialista en eventos de esta naturaleza, explicó cuáles son otras posibles consecuencias de la tormenta solar:
“La tormenta podría llevar las auroras boreales a lugares como Northumberland y Norfolk del Reino Unido. Maine, Minnesota y Washington de los Estados Unidos. Y hasta el sur de Nueva Zelanda y Tasmania. Las predicciones muestran que el impacto con la Tierra sería en la tarde del 19 de agosto o a mediodía del 20. En cualquier caso, se esperan posibles auroras en latitudes centrales. Por otro lado, habrá problemas de recepción en radio y GPS cuando la tormenta golpee”
Además de ello, es probable que ocurran algunos apagones y que las telecomunicaciones se vean interferidas momentáneamente mientras la tormenta pasa por el espectro terrestre de radiofrecuencia. Más allá de eso, este evento solar es, por ahora, inofensivo.
Este tipo de tormentas solares son completamente previsibles y, por ahora, no ha existido una de tal magnitud que represente un real peligro para la vida en la Tierra o la vida moderna que llevamos, solo un leve y breve desajuste electromagnético.
Las tormentas solares se producen por una expulsión de masa coronal del Sol hacia sus alrededores. Estas masas viajan y suelen impactar a los planetas a su alrededor. En el caso de la Tierra, por su distancia con el Sol, es poco probable que estos eventos le afecten constantemente, pero en esta ocasión coincidirá con su órbita.
