La vida quiso que George Lucas, quien quería ser piloto de carreras profesional, tuviera un accidente y desistiera de su sueño. Gracias a ese terrible infortunio, nos entregó una de la saga más memorable de la historia del cine. Cuando el Episodio IV, A New Hope, se estrenó el 25 de mayo de 1977 en Estados Unidos se hizo en poco menos de 40 salas de cine, pero rápidamente se instaló en más de 1000 salas de cine y la revista Variety reconoció al instante que George Lucas había creado una genialidad de lugares comunes:
“Geroge Lucas ha intentado hacer la aventura de fantasía más grande posible a partir de sus recuerdos sobre culebrones y viejas películas de acción y lo ha conseguido brillantemente”.
El resto es historia, los siguientes episodios de Star Wars sólo fueron haciendo cada vez más sólida la mitología de las películas alrededor de todo el mundo. Afortunadamente, su éxito internacional trajo consigo la posibilidad para que varios artistas plásticos en muchos países interpretaran las películas desde su propia perspectiva, regalándonos distintos pósters que rayan en la genialidad, la locura y la hermosura que sólo la diversidad de aquella época, en la que la publicidad cinematográfica no estaba homogeneizada, le permitía cada país crear un arte propio para sus películas.
A continuación, te presentamos los mejores carteles de los episodios IV, V y VI, que resultan relevantes, tanto por su genialidad como por ser tan peculiares, al tiempo que repasamos la historia de algunos clásicos.
Reino Unido (1976)
El incónico póster de los hermanos Hildebrandt.
En 1977, 20th Century Fox le había encargado al artista Tom Jung un póster promocional de la cinta, pero los ejecutivos de la productora (hoy adquirida por Disney) consideraron este cartel como “demasiado oscuro”. Entonces la Fox se acercó a los gemelos Hildebrant para que crearan un cartel que funcionara para promocionar la película. Los hermanos trabajaron a marchas forzadas y por turnos para entregar su trabajo en 36 horas. Su versión del póster, denominada Style B, se distribuyó para ser utilizada en las carteleras de cine británico y posiblemente se convirtiera en su obra más conocida.
Estados Unidos (1987)
El Oscuro y sensual póster de Tom Jung.
A pesar de que a la Fox le pareció oscuro, el cartel de Tom Jung se utilizó posteriormente para promocionar la película en Estados Unidos. Lo cierto es que se trata de un póster menos “inocente” que el de los hermanos Hildebrant. La idea de Jung partió de una serie de fotografías del rodaje y una frase: “bueno contra malo”, de ahí que la cruz que traza el sable de Luke en la imagen sea considerado por su autor como la mejor solución para ilustrar esa idea.
Este póster no se utilizó nunca, sin embargo la figura del vaquero intergaláctico encarnado por Luke Skywalker trajo de regreso a héroes como Buck Rogers y Flash Gordon.
México (1978)
Solamente hay que centrar nuestra atención en “Ahora, por primera vez, Totalmente hablada en Español! Para niños de 4 a 80 años”. Ese guiño a la eterna niñez es sencillamente hermoso.
Italia (1977)
El creador de esta maravilla es Michelangelo Papuzza y si lo vemos con atención los personajes, al menos los humanos, cumplen con los estereotipos de la belleza en el cine italiano. Leia, con el pelo suelto –símbolo de liberación sexual–, se acerca a mujeres hermosas como Gloria Guida, Virna Lisi, Sophia Loren o Mónica Vitti. Y Luke, mostrando sus prominentes pectorales, nos recuerda a Fabio Testi, Franco Nero o Mario Girotti (Terence Hill).
Rumania (1977)
El póster rumano toma uno de los clásicos pósters que se utilizaron en Estados Unidos para promocionar la película, sólo que se trata de una imagen en blanco y negro con un círculo rojo que muestra más sobriedad que rasgos de aventura.
Polonia (1977)
Sin duda este es uno de mis favoritos. Los polacos tienen una larga tradición en la creación artística de afiches para sus películas, sobre todo durante los años 60, 70 y 80, pues vigilados por la censura comunista, los artistas polacos tenían que reinterpretar los carteles originales de Hollywood con elementos de vanguardia. Incluso, muchos de estos pósters se consideran de coleccionista y alcanzan cuantiosas cotizaciones.
Hungría (1979)
Sí, la película llegó a Hungría dos años después de su estreno, la comercialización cinematográfica era muy distinta a cómo es ahora, y el genio de András Felvidéki creó este peculiar cartel de A New Hope, otro de mis favoritos. La imagen tiene todas las características estilísticas de la época que recuerdan a la psicodelia. Personajes distorsionados y obscenos hacen gala de presencia en este cartel. Además, el nombre de George Lucas está mal escrito. Se trata de una verdadera joya para los coleccionistas.
Hungría (1979)
Sin duda alguna, los húngaros se las pintaban solos para el arte de sus carteles. Este póster creado por Tibor Helényi no sólo es una locura por su interpretación peculiar de Darth Vader donde, por cierto, R2-D2 forma parte del hombro del villano, también es increíble porque los Jedi están representados por una especie de lagarto-dragón que tiene una especie de cimitarra láser. Simplemente kitch y hermoso. Un dato curioso: en los años noventa este cartel y el de las dos secuelas con el mismo estilo fueron remanufacturados y se sacaron versiones monocromáticas de los mismos pero, por extraño que parezca, nunca se han comercializado.