Para que las empresas de streaming “contribuyan a la base económica de sostenimiento del Estado”, la diputada del partido Morena, Reyna Ascencio, propuso un impuesto de 7% sobre su precio de suscripción. Además, toda aquella empresa de video que no tenga oficinas en México, deberán pagar una tasa extra de 15%. Este impuesto sería independiente al IVA (16%) que ya se paga en los servicios desde el 2020.
La polémica propuesta de la diputada tiene como propósito que compañías como Netflix, Amazon Prime Video, Disney + y otras, establezcan un lugar de operaciones en el país. El gravamen se justifica sobre el hecho de que las empresas de streaming raramente invierten en los paises y solo usan su infraestructura pública.
La iniciativa de Morena establece que 40% de los recaudado de ese 4% a todos los servicios deberá destinarse a programas sociales. La prioridad serían las comunidades indígenas y rurales sin acceso a servicios básicos de telecomunicaciones.
Impuestos en servicios de streaming
La necesidad de implementar impuestos para los servicios de streaming se viene planteando desde hace, por lo menos, 2 años y no es un fenómeno exclusivo de México. Los impuestos a la economía digital también se han extendido a los trabajadores que laboran en el sector teniendo cuotas especiales de ISR.
Por cierto, compañías nacionales como Blim o Clarovideo quedarían excentas de este impuesto, en caso de ser aprobado.
Esta propuesta tendrá que ser aprobada por ambas cámaras en el congreso y establecer modificaciones si se requieren. Aunque todavía le quedan algunos obstaculos para concretarse, cada vez son más constantes estas “iniciativas” para implementar impuestos a los servicios de streaming.
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