La fiebre por el “peor juego de la historia” sigue a pesar de la efímera vida del Flappy Bird original, por ello una nueva y creativa parodia de la aplicación se une a las ya existentes.
Si Dong Nguyen cobrara por cada homenaje/parodia que realizan de su creación, seguramente recibiría tanto dinero como los 50,000 dolares diarios que ganaba en el punto de mayor popularidad de Flappy Bird.
Ahora, la desarrolladora independiente Fawn Qiu construyó una forma de traer el juego al mundo real a través de una caja, sospechosamente parecida a una consola NES, controlada por dos servomotores, unos imanes, y un interruptor, todo trabajando gracias al software de Arduino.
La caja recrea el frustrante juego de Nguyen y se cierra inevitablemente cuando uno comete un error. En su página Qiu reconoce, al contrario del programador vietnamita, que ella se inspiró en otro programador de Arduino que recreó Super Mario Bros en una caja.