Un equipo de investigadores del Hospital de China Occidental en Chengdu realizó las primeras pruebas positivas de tratamiento con células modificadas, con tecnología de edición de genes CRISPR, en pacientes de cáncer de pulmón lo cual puede abrir la puerta a un nuevo tratamiento seguro y duradero contra esta enfermedad.
La técnica de edición genética CRISPR se basa en un complejo sistema inmunitario de las bacterias que les protege contra los virus. Se trata de una inmunidad adquirida, o adaptativa, que «recuerda» las secuencias de ADN de los patógenos de ataques anteriores y corta su ADN en caso de una nueva infección.
Una célula de cáncer de pulmón (coloreada artificialmente). Un posible tratamiento para el cáncer de pulmón provocó la primera prueba en humanos de la edición del gen CRISPR. Crédito: Steve Gschmeissner / SPL
Los investigadores tomaron células inmunes de personas con cáncer de pulmón agresivo y les aplicó CRISPR para desactivar un gen llamado PD-1. Por lo general, la proteína PD-1 envía señales que evitan que las células inmunes monten un ataque contra los propios tejidos del cuerpo, pero la PD-1 activa puede abrir la puerta a la propagación del cáncer.
El equipo inyectó a cada participante del estudio versiones editadas de sus propias células inmunes. Las células modificadas permanecieron en la sangre durante al menos cuatro semanas, lo que demuestra que la estrategia podría tener un efecto duradero. Esas son las buenas noticias, las malas es que este experimento involucró solo a 12 personas con cáncer y no alargó la vida de los participantes.
Los participantes experimentaron solo efectos secundarios leves y las mutaciones potencialmente peligrosas causadas por la edición de genes, el principal temor del investigador, fueron limitadas.
Los investigadores dijeron que se deben realizar estudios más amplios con sistemas de edición de genes más recientes para mejorar los resultados.