La retrocompatibilidad es, hasta el momento, una de las cartas más fuertes de Xbox para su siguiente generación de consolas, pero parece que PlayStation no se va a quedar atrás, pues se filtró una patente que indica que existirá posibilidad de jugar títulos de PS1, PS2 y PS3 en esta consola.
La patente indica que esto será posible a través de un sistema emulado dentro de la misma PS5, que permitirá que los juegos sean reproducidos como contenido extra dentro de la plataforma de PlayStation.
Esto indica, sobre todo, que la retrocompatibilidad dentro de PS5 no estará optimizada para ser jugada de manera nativa, aprovechando todas las ventajas de su nuevo armado, que compite con un PC gaming de gama alta.
Por el contrario, la reproducción, calidad y estabilidad de estos estarían definidos y determinados por su sistema de emulación que, nuevamente, la patente sugiera que sería mediante un servicio de streaming, de la manera en que funciona Stadia, por poner un ejemplo.
A diferencia de Xbox, que no solamente implementará retrocompatibilidad nativa, sino que también optimizará los juegos desde su primer consola hasta la actual, PS5 está tomando un paso atrás al menos en lo que se refiere a la apertura de su nueva generación a títulos antiguos.
Una de las principales críticas a Sony y su nueva generación de consolas era la limitante y lo cerrado de su sistema, que de primer momento ni siquiera fue anunciado de manera directa. Sin embargo, con esta nueva filtración se puede observar que están escuchando a la comunidad, que pide no solamente tener nuevos lanzamientos, sino la posibilidad de jugar contenidos de generaciones anteriores.
Por supuesto, en ambos casos esta posibilidad está aplicada como un servicio extra, no como una capacidad de hardware para correr títulos que antes funcionaban (y estaban limitados, también) por sus soportes físicos, es decir, los discos.
(SIE)
