Un caso judicial llevó a la cárcel directivo.
Ayer se dio a conocer que Diego Dzodan, vicepresidente de Facebook e Instagram para Latinoamérica, había sido detenido en Brasil. ¿El motivo? La policía local consideró que no estaba colaborando lo suficiente en ayudarlos a resolver un caso.
Dzodan fue detenido al salir de su casa en la ciudad de Sao Paulo, aduciendo que se negó a desencriptar unos mensajes WhatsApp, servicio propiedad de Facebook. Los mensajes habían sido enviado por un presunto traficante de cocaína, y por tanto las autoridades lo acusaron de que estaba obstruyendo la investigación policial.
El juez Marcel Maia Montalvao había solicitado por escrito hace cuatro meses a Dzodan información de la base de datos de WhatsApp, incluyendo nombres de contactos, direcciones y claves de acceso a las redes sociales del supuesto narcotraficante, señalando que solo era información de algunas “pocas personas”. Dzodan se negó a proporcionar la información, argumentando “que son datos secretos de los usuarios”. El ejecutivo fue trasladado a un centro de detención temporal en la zona oeste de Sao Paulo. Además, desde hace dos meses se le puso una multa a Facebook de 12,500 dólares diarios por desacato, la cual aumentó a unos 253,000 dólares diarios.
Facebook emitió un comunicado (difundido por AFP) donde condena el arresto de Dzodan y señala:
“Estamos decepcionados con la medida extrema y desproporcionada de tener un ejecutivo de Facebook escoltado hasta la comisaría debido a un caso relacionado con WhatsApp, que funciona separadamente de Facebook”, señaló el comunicado.
En respuesta, e juez brasileño argumentó:
“Es importante la quiebra (del secreto de datos) porque si no, los delincuentes cometen un crimen y quedan en un ambiente desprovisto de ley”.
A las primeras horas de hoy, un segundo juez ordenó la liberación de Diego Dzodan, un día después de ser arrestado por negarse a entregar a la policía mensajes de WhatsApp en el marco de una investigación antinarcóticos. El juez Ruy Pinheiro consideró la detención de Dzodan fue una “coerción ilegal”.