Bajo el nombre de Ghost Gunner, la maquina permite construir rifles que no cuentan con numero de serie, ni ningún tipo de registro, además de estar al alcance de cualquier persona sin necesidad de licencia de portación de armas.
El miércoles pasado Cody Wilson -quien saltó a la fama por realizar la primer pistola impresa en 3D que funcionaba y de la que regaló los planos por internet-, comenzó un proyecto de crowdfunding personal buscando ver que tan bien se vendía su maquina casera para fabricar rifles. En menos de un día Wilsons sobrepasó su estimación de pedidos.
Wilson esperaba llegar a una meta de 110 pedidos en el transcurso de un par de semanas, pero en tan solo un día acumuló 200 ordenes de pedido de la Ghost Gunner. En vista de que ya fue rebasado por la demanda, para completar los pedidos a tiempo Wilson contrató a un ayudante que le eche la mano en su laborioso trabajo. Para no desaprovechar la oportunidad de hacer un buen negocio, Wilson subió el precio de su máquina, que paso de 999 dólares a 1299 dólares en un día.
La polemica Ghost Gunner
“La gente quiere esta máquina. La gente quiere tener un rifle en casa, la comodidad de la replicabilidad, y el componente de privacidad. Ellos lo quieren, y lo están comprando”, declaró Wilson.
A pesar de que a simple vista la Ghost Gunner aparenta ser una impresora 3D, en realidad es un diminuto torno CNC acondicionado para crear piezas de madera, metal o plástico que sirvan para construir con facilidad una replica de un fusil de asalto AR-15.
Wilson forma parte de la asociación Defense Distributed, que busca eliminar las restricciones del uso de las armas en Estados Unidos y a la que planea donar las ganancias de su máquina. A pesar de que con la Ghost Gunner se puede construir la mayoría de las piezas del rifle(80 por ciento), aun será necesario comprar un par de partes de manera independiente para poder tener un rifle funcional, aunque, de acuerdo con Wilson son piezas fáciles de conseguir.
La salida a la venta de la Ghost Gunner también es una protesta de Wilson en contra de una propuesta de enmienda que busca prohibir la fabricación de armas caseras en Estados Unidos. Actualmente restan 18 días para que Wilson termine su periodo de recaudación de fondos y promete entregar los primeros pedidos de su invento a finales de año.