Hollywood está de luto. David Nichols, una figura detrás de las cámaras y de todos los reflectores -que transformó el lenguaje visual del cine- y que participó en películas tan icónicas como Taxi Driver (1976) y Rocky (1976), murió a los 78 años el pasado miéArcoles en Taos, Nuevo México, de acuerdo con Variety.
Nichols trabajó por más de 30 años en Hollywood como diseñador de producción y consultor visual de cineastas como Martin Scorsese. Fue colaborador frecuente de Scorses e incluso, en Taxi Driver realizó un pequeño cameo en la película como extra en una de las secuencias cuando Travis asiste a un mitin político. Trabajó en múltiples proyectos tanto en cine como en Broadway, en la que también sirvió como escritor, director de arte y actor. Pero a diferencia de Scorsese, que odia el cine basado en personajes de cómics, Nichols alguna vez creyó en este prolífico género cuando en 1982 trabajó en la versión cinematográfica de Swamp Thing (del director Wes Craven) como diseñador de producción.
Además, Nichols también estuvo detrás de Groundhog Day (1993), protagonizada por Bill Murray; pero sus créditos también aparecen en Gossip, Buddy, Mr. Holland’s Opus, A Midnight Clear, Great Balls of Fire!, The Serpent and the Rainbow, Hoosiers, Heartbreakers, Found Money, Testament y Longshot.
Se desconocen las causas de la muerte de Nichols, pero de acuerdo con el informe de su fallecimiento, su familia espera que al concluir la pandemia de Covid-19, puedan conmemorar la vida del artista.
