La historia de Alejandro Jodorowsky y Dune es muy conocida. En la década de 1970 el director chileno trató de llevar el proyecto a la pantalla grande sin éxito y, él afirma, le fue tan mal que tomaron sus ideas para hacer otras películas, como Star Wars. Con la nueva versión de Denis Villeneuve en camino y el primer tráiler liberado, le preguntaron su opinión y no fue favorable.
“Vi el tráiler, está muy bien hecho. Podemos ver que es un cine industrial, que hay un montón de dinero y que es muy costosa. Pero si es costosa, debe pagar en proporción y ese es el problema. No hay sorpresas”, dijo Jodorowsky.
Jodorowsky ya ha dicho con anterioridad que Dune es una obra “muy, muy literaria” que es muy difícil adaptar al lenguaje cinematográfico.
“Para mí, una película debería abrirse a otro mundo. Mi Dune, la vi un poco como Nadja de André Breton. No es una obra, sino un manifiesto para penetrar en la mente de los individuos y provocar una pandemia, pero que es volcada hacia la vida y no hacia la muerte como la que conocemos hoy, los amantes de Dune esperan algo profundo, complejo, literario, perfectamente imposible de transcribir en el largo clásico de una película. ¡Se suponía que mi Dune duraría 14 horas! Me digo que su formato podría haber correspondido finalmente al de una serie contemporánea. Hacer de Dune una película tradicional es condenarse a ofrecer un fragmento de ella”, dijo el director.
Todo lo anterior bien podría traducirse como “nadie puede hacerlo bien, sólo yo”. El director dijo que seguramente Dune será muy exitosa pero recalcó que es una película industrial más y no ofrecerá nada nuevo.
