¿Últimamente has sentido que cada día que pasas en el planeta Tierra se hace más largo de lo normal? Unos dirán que es porque estamos envejeciendo, y aunque no se equivocan, tampoco tienen completamente la razón. De hecho no eres el único que siente eso, pues según la ciencia a lo largo de los años, los días terrestres han ido aumentando su duración.
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Cuando el planeta Tierra era todavía un retoño, allá por el período Cretáceo (que comenzó hace 145 millones de años y terminó hace 66 millones de años), los días duraban a penas 23.5 horas. Con el paso de los milenios los días comenzaron a durar más hasta llegar al ciclo de 24 horas de hoy en día (23 horas 56 minutos y 4.091 segundos para ser exactos). De hecho durante este período de la historia del planeta, los años tenían una semana de más.
Pero, ¿cómo sabemos todo esto? Bueno, pues un nuevo método empleado por los científicos nos ha permitido llegar a esta conclusión. Un estudio de Live Science sondeó piezas de antiguos moluscos con lásers que servían para medir cuánto tiempo estuvieron expuestos a la luz del Sol cada día.
“Cada día obtenemos de cuatro a cinco puntos de información, y esto es algo que casi nunca ves en la historia geológica. Básicamente podemos observar un día de hace 70 millones de años. Es bastante sorprendente”, comentó Niels de Winter, geólogo de la Vrije Universiteit Brussel.
Los días duraban media hora menos que ahora en el período cretáceo, pero los años han durado más o menos lo mismo desde entonces, pues la rotación de la Tierra en torno al Sol no se ha modificado. Sin embargo el número de días ha disminuido porque se han vuelto más largos. Esto se debe a varios factores, entre ellos que el agua del mar, que cubre aproximadamente el 70% de la superficie del planeta, ha hecho que disminuya su velocidad por la fricción.
