Spot, el infame perro robot de Boston Dynamics, cada vez es más digno de un capítulo de Black Mirror. El perro de Boston Dynamics también es útil para la guerra por su buena puntería. Ya casi sabe mear con mejor puntería que tú.
El RoboPerro de Boston Dynamics ya es más como un buen meme que un mal augurio del futuro. Ahora cualquier persona con una cartera cargada con unos 80 mil dólares puede adquirir su propio Spot y educarlo (o, en su caso, programarlo) a su antojo para hacer maravillas tan hilarantes como lo que acaba de hacer el youtuber Michael Reeves.
A través de su canal de YouTube, Reeves, un estadounidense bastante adinerado y lo suficientemente ingenioso, mostró cómo diseñó un pene para Spot. El penehueso del RoboPerro está basado en un gimbal, una plataforma motorizada, de dos ejes, tres servomotores, un solenoide y una manguera que simula ser una uretra.
Luego de tener el pene de Spot listo, Reeves programó un procesador Raspberry Pi con una cámara de reconocimiento para que pudiera atinarle con precisión al fondo de un vaso de plástico. A partir de un modelo de aprendizaje automático TensorFlow Spot puede andar por la vida buscando vasos vacíos que requieran un buen refill.
Aquí puedes ver a Spot orinando:
Reeves nombró a su Spot “Pissbot 9000” y, como ya te habrás dado cuenta, aún le falta mucho por aprender. La precisión de su tiro es del 35%, pero su mayor de los problemas no es ese, sino que el poder de su chorro es tan prominente que la cerveza termina reducida a un montón de espuma.
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Mientras que el Pissbot 9000 aprende a servir mejor la cervaza, ¿algún día la inteligencia artificial podrá sustituir a los humanos? No dejes de visitar nuestro canal de YouTube para más contenido postapocalíptico.
