Reseña— Fracter: Cuando el minimalismo oscuro es aterrador y encantador

Fracter, para Nintendo Switch, fue toda una grata sorpresa. Un juego independiente cortesía de 4L Games, que busca retarnos, de manera aterrador y encantadora, a enfrentarnos a la oscuridad. Pero no a cualquier oscuridad, sino a la que existe dentro de nosotros.

¿Le temes a la oscuridad?

La trama de Fracter, es tan básica como cualquier juego independiente, pero funciona muy bien. Tomamos el control de un personaje que parece ser una niña, pero a este personaje no se le da nombre ni se aclara la razón por la que está en este mundo oscuro y de pesadilla.

Aún más simple es la explicación del objetivo del juego: la disipación de la oscuridad que reside dentro del propio personaje. Esto le da una profundidad inesperada a este tipo de juegos, porque lleva Fracter a un paso más allá.

Para poder lograrlo, tenemos que resolver acertijos y evitar enemigos, que podrían ser considerados como productos de la propia oscuridad del personaje. En otras palabras, Fracter busca ilustrar de manera metafórica, como es la lucha contra la oscuridad que existe dentro de todos nosotros.

Terror encantador

Los mencionados puzzles que tenemos que resolver consisten en mover espejos y hacer que reflejen la luz. A medida que vamos progresando, Fracter nos ofrece un abanico más amplio de acertijos, aunque la mecánica del juego se basa en empujar y reflejar la luz.

En cada nivel, hay una fuente de luz que debemos refractar, usando los espejos que el personaje tiene que empujar, mientras nos escondemos de los enemigos que se arrastran por la negrura.

Esto hace que el Fracter tenga una buena dosis de terror. Dentro de su simplismo monocromático e isométrico, los desarrolladores lograron crear un ambiente misterioso y tenebroso. Logra que saltemos en varias ocasiones, porque el aspecto hace que no esperemos algo así.

Sin embargo, los acertijos están bien diseñados y con el suficiente grado de dificultad. Esto nos hace que tentamos que estar buscando la mejor manera de resolverlos. No son física cuántica, lo cual es un factor positivo, ya que mantiene el juego accesible, pero son lo suficientemente desafiantes como para sentirnos gratificados cuando logramos resolverlos.

En cuanto a los enemigos, si no tenemos más opción que enfrentarlos, lo tenemos que hacer con ingenio. Nuestro personaje no usa ni tiene armas. Podemos destruirlos, pero solo utilizando fuentes de luz que tenemos disponibles. Cuando movemos un rayo en el camino directo de una sombra, se desintegrará.

También podemos usar esos rayos de luz para protegernos de las sombras. Si hay un rayo cerca, la sombra no intentará traspasarlo para atacarnos. En su lugar, golpeará con el puño la barrera de luz y luego se alejará.

Por lo tanto, hay que siempre estar muy atentos al ambiente que nos rodea, teniendo siempre presente que en Fracter la luz es nuestra mejor aliada para poder seguir adelante.

Sonido ambiente

La banda sonora de Fracter merece un apartado propio porque es hermosa. Es otro ejemplo del cuidado que pusieron los desarrolladores para darnos un juego redondo.

La música crea el ambiente y el escenario ideal. El mood de cada nivel logra el efecto que busca en buena parte gracias a la selección musical.

Por ejemplo, la luz. Cuando movemos los rayos para reflejarla, suena de una manera que nos recuerda a Encuentros Cercanos del Tercer Tipo. Sin embargo, no todos los rayos suenan igual. Cada uno de ellos tiene un tono distinto, que suma a este juego encantador.

Llevando los juegos indie en la dirección correcta

Los juegos independientes son conocidos por no tomar muchas horas y por que son una buena inversión para matar el tiempo. Lo que hace Fracter es tomar esa idea y mostrar que incluso los juegos indie pueden explotar la creatividad a otro nivel, para daros un producto original, novedoso y profundo.

Tal vez esa sea mi única queja de Fracter (esa y uno que otr glitch), su duración. Es un juego corto y que hubiera sido genial que durara un poco más.

No obstante, el esfuerzo de tratar de darnos un juego con tantas capas de profanidad dentro de su minimalismo es algo muy loable y marca el camino de lo que puede darnos un juego indie.

Lo bueno

• Su originalidad
• Su aspecto aterradoramente encantador
• Una historia increíblemente profunda
• Gráficos oscuros y minimalistas
• Diseño de los niveles
• Dificultad ideal en los puzzles
• Una banda sonora que es perfecta para crear el ambiente
• Marca la dirección correcta para los juegos indies

Lo malo

• Es un juego corto
• Uno que otro glitch

Veredicto

Fracter es una joya. Un juego cargado de simbolismo, profundo, aterrador, oscuro, pero sobre todo, encantador. A pesar de que es muy corto, es una experiencia muy disfrutable y satisfactoria en el Nintendo Switch.

Si quieren probar un juego que se nota que está hecho con el corazón, sin mayores pretensiones, Fracter es para ustedes. No se arrepentirán.