Reseña – Your Place or Mine, otra mala comedia romántica para el Día de San Valentín
Como cada año, el Día de San Valentín sirve a las grandes productoras de cine y televisión para lanzar algún proyecto relacionado al romance, a la amistad o algo que haga alusión a esta fecha tan efímera. En esta ocasión, Netflix fue la que quiso sacar su lado cursi con Your Place or Mine, una nueva comedia romántica protagonizada por el especialista en el género, Ashton Kutcher, acompañado de otra experta, Reese Witherspoon.
Sin embargo, y a pesar de tener dos estrellas que han forjado gran parte de su carrera a través de películas que ahondan en la comedia romántica, nos quedamos con una muy sosa interpretación por parte ambos, y con una historia que tiene poco o nada que ofrecer, que ni es lo suficientemente cursi, ni es lo suficientemente divertida. Carece completamente de fondo como para poder encontrar un mensaje que la lleve más allá de lo superficial o que la diferencie de las decenas de películas con el mismo estilo que hemos visto por años y que llegan a cartelera o plataformas de streaming como una mala relación amorosa que resulta muy fácil de olvidar.
Ni el maestro de la comedia romántica pudo sacar a flote esta película | Foto: Netflix
La historia sigue Debbie y a Peter, dos individuos totalmente “opuestos” quienes después de su primer y único encuentro sexual en la juventud, se convierten en mejores amigos y establecen una relación aparentemente sólida basada en la total honestidad y apertura a temas personales, aunque eso sí, con su respectiva distancia ya que Debbie vive felizmente en Los Ángeles con su hijo producto de un matrimonio fallido, mientras que Peter es un exitoso escritor experto en marketing que vive en un departamento de lujo en Nueva York. Esta premisa ya parece extraña por el hecho de que dos personas que viven tan separadas en realidad llevan una vida totalmente íntima a través del teléfono celular, y, por otra parte, porque mantiene totalmente separados a los actores y más con lo que ocurre a continuación.
Debbie decide ir a Nueva York a cursar una especialidad y a la vez encontrarse con su amigo; sin embargo, todo parece arruinado cuando quien iba a hacer de niñera de su alérgico y sobreprotegido hijo le cancela de último momento. Es así que Peter sale al rescate y le propone ir a cuidar a su hijo a LA mientras ella viaja a la Gran Manzana a hacer sus cosas, lo que los lleva a intercambiar de casas y de vidas durante una semana.
Esto obviamente los invita a mirar la vida desde la perspectiva de su contraparte para así darse cuenta de lo que siempre habían necesitado uno del otro, algo que queda más que explícito desde el inicio de la película con la muy forzada relación de amigos que se hablan todos los días para contarse todo y porque el mismo póster promocional ya te dice que va a pasar al final. En ningún momento esta comedia romántica siembra dudas sobre el destino de los protagonistas, y eso es precisamente lo primero que necesita una historia de este género para funcionar.
Reese interactúa más con Zoë que con Ashton | Foto: Netflix
Your Place or Mine de la guionista y directora Aline Brosh McKenna es sin duda una película que confía tanto en sus dos protagonistas que al final termina descuidando por completo el resto de elementos narrativos que la componen; la trama misma, el guion, la construcción de sus personajes principales y especialmente los secundarios (Zoë Chao, Tig Notaro, Steve Zahn) quienes buscan cumplir con ese rol “chistoso” o agradable en medio de la problemática y, sin embargo, son castigados por la completa irrelevancia que los caracteriza.
Este largometraje es en resumen insustancial, no tiene sorpresa alguna y no te aporta absolutamente nada, tan es así que podrías poner la película mientras cocinas, trabajas o haces cualquier otra cosa con la certeza de que no importa cuanto desvíes la mirada de la pantalla, ya que en ningún momento te estarás perdiendo algo relevante pues como ya he dicho antes, el final está más que cantado desde el inicio.
Lo bueno
- Ver a Ashton Kutcher y Reese Witherspoon de vuelta a sus raíces como actores.
Lo malo
- Cero interacción entre los protagonistas.
- Los personajes secundarios resultan irrelevantes y se desperdicia el talento de actores como Steve Zahn.
- La trama es mala, el guion es flojo y la historia se resuelve sola a los cinco minutos de la película.
- Nunca se siembra la duda sobre el destino de Debbie y Peter así que, en general, no te provoca ningún tipo de emoción.
- A pesar de ser una película con enfoque “realista”, es decir, que no se desarrolla en un escenario de ficción, la historia al final resulta bastante fantasiosa y poco creíble.
Veredicto
Your Place or Mine llega como ese hueco que Netflix necesitaba llenar para cumplir con su cuota de contenidos para el Día de San Valentín y quizá eso sea todo, pues como ya hemos dicho, estamos ante una película que no nos aportó nada en general y ni siquiera nos hizo sentir enamoradizas o enamoradizos en estos días. Quizá ver a Ashton y Reese de vuelta al género que más les ha aportado como actores es de lo más relevante porque sus interpretaciones son naturales aunque algo vacías, pero es más por cuestión de guion u otros detalles que posiblemente no les permitió explotar al 100% su expertise dentro de la comedia romántica.
Por su parte, Aline Brosh McKenna hace su debut como directora con este filme que si bien no nos molesta, si nos deja con cierto vacío al saber que la escritora de la excelente Devils Wear Prada no nos entregó algo para disfrutar, divertirnos y especialmente reflexionar.
Al final, quizá en esta sociedad donde las relaciones románticas cada vez son más escasas e infravaloradas, sea complicado para cualquiera acertar ese dardo de cursilería que de justamente en nuestro corazón.