Reseña: Crash on the Run – Un gran endless runner, un Crash Bandicoot decente
Crash está de vuelta y, así como Sonic, quiere estar en todas las plataformas disponibles en el mercado. Con Crash Bandicoot 4: It’s About Time y Crash Team Racing: Nitro Fueled, ya se ganó la atención de viejas y nuevas generaciones. Era de esperarse que ahora apunte hacia dispositivos móviles.
Crash on the Run es un endless runner para Android y iOS. A simple vista no tiene nada original que ofrecer al género ni a la saga, pero después de jugarlo un rato encuentras que lo hace un poco especial.
¿Vale la pena descargar este juego gratuito o mejor nos quedamos con espacio libre en nuestro teléfono?
¡Corre, Crash, Corre!
Los enemigos de Crash se han unido y vienen a causar problemas juntos. Depende de Crash y su hermana Coco detenerlos, pero para eso hace falta correr mucho y recolectar las piezas e ingredientes suficientes para contraatacar.
Cada nivel implica dirigir a Crash o Coco a través de pasillos extensos divididos en tres carriles. Puedes cambiar de carril, saltar, deslizarte y claro, girar. Debes esquivar obstáculos, ataques y tomar los caminos que te dan más recompensas hasta llegar a la meta.
En esencia, es un juego más de Crash, con la peculiaridad de que tú no haces avanzar al personaje. Este corre por su cuenta, sin parar, y a ti te corresponde llevarlo por el mejor camino.
Al final de cada nivel debes vencer a un mini jefe o jefe. Basta con esquivar sus ataques y acercarte lo suficiente para dar un golpe. En esencia nada de eso es complicado, y en poco tiempo se vuelve repetitivo, pero ¿cómo hace el juego para mantener tu atención?
Microtransacciones
En la interfaz principal donde eliges misiones también administras recursos. Los ingredientes y piezas que recolectas en niveles aquí los debes usar para crear los objetos necesarios para seguir jugando. No puedes elegir un nivel hasta tener las cantidades exigidas en la entrada.
Existen dos tipos de niveles: los de campaña que te hacen avanzar en la historia, y aquellos en los que corres y corres recogiendo objetos hasta que te hartes y tomes la salida. Debes jugar un buen rato los segundos si quieres acceder a los primeros.
Aquí estamos hablando de un juego endless runner gratuito para dispositivos móviles. Las virtudes y vicios de este tipo de juegos están presentes, y por vicios nos referimos por supuesto a las microtransacciones.
Crear pociones, armas o atender eventos especiales requiere de dos alternativas: paciencia o dinero. Puedes esperar los minutos u horas que el juego te pide, o puedes pagar dinero real para acceder más pronto a nuevos niveles y objetos.
Hay una gran cantidad de paquetes por comprar, que van desde vestimentas e ingredientes, hasta niveles especiales.
Hay un largo camino por recorrer
Si le tienes la suficiente paciencia a este juego, averiguas que tiene mucho más de lo que aparenta. Hay más mundos y diversidad de lo que la primera hora y media te dejan saber.
La dificultad incrementa lo suficiente como para sacarte de tu zona de confort, y al mismo tiempo se liberan más opciones en la interfaz principal. Más máquinas generadoras de recursos, más eventos y más islas con otros objetivos, aunque en esencia el gameplay sea idéntico.
Si lo vemos desde el enfoque correcto, es un juego muy largo y extenso. La cuestión es… ¿qué tanto te puedes divertir recorriendo los mismos caminos unas diez o veinte veces hasta tener acceso a otra misión diferente?
Lo bueno
Tiene toda la personalidad y encanto de Crash
Para ser un endless runner, es diverso y sustancioso
No ocupa mucho tiempo y espacio. Lo mejor es que no te lo tomes tan en serio.
Lo malo
Tiene microtransacciones porque debe tenerlas.
Es repetitivo, pero si le tienes paciencia, te muestra su diversidad.
Si de verdad tienes ganas de Crash Bandicoot y estás dispuesto a gastar dinero, mejor paga por la trilogía o Crash Bandicoot 4.
Veredicto
Crash on the Run es un buen endless runner para móviles. Y no es más que eso. Es un juego que obviamente está adaptado a la plataforma y al mercado correspondiente. Lo puedes pasar muy bien unos 15 minutos o media hora, luego déjalo descansar y continúa al día siguiente.