El Premio Nobel de la Paz 2013 fue otorgado a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
La OPAQ, con sede en La Haya, es la instancia internacional cuya misión es la vigilancia de la aplicación de la Convención sobre Armas Químicas, asegurando la destrucción y evitando el desarrollo de éstas.
El premio es otorgado en el marco del cumplimiento de los 20 años de su fundación y del comienzo del desarme químico de Siria luego de un intrincado conflicto diplomático entre Estados Unidos y Rusia sobre una posible intervención americana en contra del régimen de Bashar al Assad.
Aunque esta clase de armas fue prohibida en 1925 luego de presenciar las terribles consecuencias de su uso durante la Primera Guerra Mundial, fueron usadas también durante la Segunda y en otras intervenciones militares tales como la Guerra de Vietnam. Según los resultados de las investigaciones de la ONU y de Estados Unidos, también fueron utilizadas recientemente en Siria contra un gran número de civiles de aquél país.
Los países firmantes de la convención están comprometidos a prestar la información disponible a la OPAQ para garantizar el control y la destrucción del armamento químico en el mundo. Aunque Siria no forma parte del tratado, ha permitido la intervención de la OPAQ para coordinar su desarme. Angola, Egipto, Israel, Birmania, Sudán y Corea del Norte son estados que tampoco se han inscrito en la convención.
La entrega oficial del Premio Nobel de la Paz tendrá lugar el 10 de diciembre, aniversario luctuoso de Alfred Nobel, en la ciudad de Oslo, Noruega; a la vez que en Estocolmo, Suecia, se entregarán los restantes, según la tradición.
En 2012, el premio fue otorgado a la Unión Europea por sus aportaciones constantes a la paz y desarrollo de la democracia en y entre las naciones del viejo continente.
